La ciudad de Nazca es la capital de la provincia del mismo nombre, ubicada en  el departamento de Ica, en la costa central del Perú. Se encuentra a 588 msnm, y a 460 km al sur de Lima. Es una ciudad muy activa, debido a la gran afluencia de visitantes que llegan a diario a conocer las famosas líneas de Nazca.

 También posee un amplio  desarrollo minero, agrícola y comercial en  su entorno. Contaba con una población estimada de 49200 habitantes para el año 2019.

La ciudad de Nazca es una  importante ciudad turística  peruana, en la costa central del Perú. Su origen se remonta a la cultura Nazca, una de las civilizaciones más fascinantes del antiguo Perú, que se destacó por su arte y sus misteriosas líneas y geoglifos. La ciudad de Nazca es un destino turístico de primer orden, que ofrece al visitante la posibilidad de conocer su patrimonio cultural y natural, como las líneas de Nazca, Cahuachi, los acueductos de Cantalloc y el museo Antonini.

Origen y fundación de la ciudad de Nazca

La ciudad de Nazca tiene su origen en la cultura Nazca, una de las civilizaciones más fascinantes del antiguo Perú, que se desarrolló entre los siglos I y VII d. C. en los valles del actual departamento de Ica. Su centro estaba ubicado en Cahuachi, en el margen izquierdo del río Grande, en la actual provincia de Nazca. Su territorio llegó a abarcar desde Chincha por el norte, hasta Arequipa por el sur. 

Los nazcas se destacaron  por su arte cerámico, textil y metalúrgico, así como por sus misteriosas líneas y geoglifos trazados en el desierto.

La fundación española de la ciudad de Nazca tiene dos versiones. Según la primera  que nos dejaron algunos cronistas en algunos escritos, fue fundada el 28 de octubre de 1548, por encargo del pacificador Pedro de la Gasca, por don Alonso de Mendoza. 

La otra versión dice que fue fundada por el virrey García Hurtado de Mendoza, marqués de Cañete, en 1591. Nazca también fue conocida por producir un aguardiente de uva -similar al pisco- destinado para el consumo de los esclavos, y al que los habitantes locales llamaron Nazca.

Atractivos turísticos de la ciudad de Nazca

La ciudad de Nazca es un destino turístico de primer orden, debido a la riqueza de su patrimonio cultural y natural. Entre sus principales atractivos se encuentran:

Las líneas de Nazca: 

Son geoglifos con  figuras gigantescas de animales, vegetales,  humanos y trazados geométricos, hechos a una escala extraordinariamente grande y con mucha precisión. Solo pueden ser apreciadas desde el aire o desde las colinas cercanas. Se extienden en una zona de 350 kilómetros cuadrados. 

Se ignora su fin, aunque se ha teorizado que fueran un gigantesco calendario, resultado de observaciones astronómicas, o que sirvieran como epicentros de la actividad ritualista tanto de los nazcas como de otras culturas cercanas.

Cahuachi: 

Es el centro ceremonial más importante de la cultura Nazca, ubicado a 28 km de la ciudad de Nazca. Se trata de un conjunto de pirámides de adobe, plazas y recintos, que se extiende por más de 24 hectáreas. Fue un lugar de peregrinación y ofrenda para los nazcas, que lo abandonaron tras un terremoto en el siglo IV d. C.

Acueductos de Cantalloc:

Son una red de canales subterráneos con ventilación, que permitieron a los nazcas aprovechar el agua de los ríos subterráneos y regar sus cultivos en una zona árida y desértica. Son una muestra de la ingeniería hidráulica de esta cultura, que logró resolver el problema de la escasez de agua. Algunos de estos acueductos siguen funcionando hasta hoy.

Museo Antonini: 

Es un museo arqueológico que exhibe piezas de la cultura Nazca, como cerámicas, textiles, momias, instrumentos musicales y objetos de oro y plata. También cuenta con una réplica de un acueducto nazca y un jardín botánico con plantas nativas.

La ciudad de Nazca es una  importante ciudad turística  peruana, en la costa central del Perú. Su origen se remonta a la cultura Nazca, una de las civilizaciones más fascinantes del antiguo Perú, que se destacó por su arte y sus misteriosas líneas y geoglifos. La ciudad de Nazca es un destino turístico de primer orden, que ofrece al visitante la posibilidad de conocer su patrimonio cultural y natural, como las líneas de Nazca, Cahuachi, los acueductos de Cantalloc y el museo Antonini.

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